Un conflicto en el Centro de Desarrollo Infantil (CDI) de Guatraché generó revuelo en las últimas horas, tras la renuncia simultánea de seis trabajadoras y una portera. A través de un comunicado difundido en redes sociales, las mujeres señalaron “malos tratos, falta de valoración” y condiciones laborales que consideran insostenibles como las principales razones de su alejamiento.

En su mensaje, las trabajadoras manifestaron que la decisión fue tomada “tras una profunda reflexión” y lamentaron tener que dejar sus funciones: “El compromiso con las infancias fue siempre el motor de nuestro trabajo”, expresaron. Sin embargo, aseguraron que ante la ausencia de mejoras en el trato, la falta de insumos y una remuneración insuficiente, optaron por cerrar un ciclo.

“Nos duele alejarnos de cada peque con quienes compartimos abrazos, aprendizajes y momentos inolvidables”, escribieron las renunciantes, identificándose como las “Seño Flor, Gime, Ro, Vane, Ita y Noe”.

El trasfondo del conflicto

La situación se tornó rápidamente tema de conversación en la localidad. Según trascendió, las trabajadoras no solo planteaban reclamos salariales, sino también problemas vinculados a la falta de recursos en el CDI. Además, la reciente convocatoria a concurso para cubrir cargos, impulsada por la Municipalidad ante el vencimiento de los contratos a fines de junio, habría sido el detonante de la crisis.

Fuentes locales indicaron que tras la renuncia de la directora del centro, el equipo había solicitado materiales esenciales para su labor diaria. La falta de respuesta y la ausencia de una autoridad clara en el lugar profundizaron el malestar interno.

La postura oficial

Consultado por este medio, el intendente Sergio Arrese explicó que la administración municipal llamó a concurso para mejorar el funcionamiento del CDI, y subrayó que las trabajadoras tuvieron la posibilidad de presentarse para continuar en sus puestos.

“No se despidió a nadie”, remarcó el jefe comunal. “Se vencían los contratos y se optó por abrir un concurso abierto para ordenar la gestión interna, especialmente después de los problemas de convivencia que existieron con la anterior directora”, detalló.

Arrese también recordó que en una oportunidad se aplicó un descuento salarial a las empleadas que se ausentaron de manera coordinada en una jornada laboral, aclarando que dicha medida fue tomada según lo establecido en las normativas vigentes.

Finalmente, sostuvo que la Municipalidad se mostró siempre abierta al diálogo y la recepción de reclamos, y que la renuncia fue una decisión tomada por las propias trabajadoras.