Un grupo de comerciantes del microcentro de Santa Rosa se manifestó este domingo por la tarde frente al edificio municipal para exigir mayor celeridad en las obras de semipeatonalización. Aunque destacaron su apoyo al proyecto de modernización urbana, señalaron que los trabajos iniciados en febrero provocaron una caída de hasta el 80 % en las ventas de algunos rubros y pusieron en riesgo la continuidad de varios locales.

La concentración tuvo lugar sobre la avenida San Martín, donde unos 50 comerciantes expresaron su malestar por el impacto económico que les generó la interrupción del tránsito en la zona. Graciela Errea, titular de Mega Deportes, dialogó con medios locales y expresó: “Apoyamos el embellecimiento de la ciudad, pero pedimos que se acelere la obra porque nuestras ventas cayeron al menos un 50 %. Hay despidos, comercios en crisis, y algunos ya evalúan cerrar”.

Pedido urgente al municipio

Los comerciantes solicitaron al Ejecutivo municipal una fecha clara de finalización de los trabajos y propusieron que se aceleren los tiempos de obra trabajando también los fines de semana. “El ahorro que logra el municipio al no trabajar feriados, lo pagamos nosotros con nuestras pérdidas”, sostuvo Errea.

Además, informaron que a través de la Cámara de Comercio, Industria y Producción (CACIP) se pidió una reunión con el intendente Luciano di Nápoli. Este lunes le entregarán una carta con los principales reclamos del sector.

“Hay cerca de 30 comercios por cuadra que están siendo afectados, sin contar los de calles aledañas como Gil y Avellaneda. El problema es que las aperturas de calles no fueron planificadas para mantener activo el movimiento comercial”, subrayaron.

Propuestas y testimonios

Como medida de alivio, los comerciantes también solicitaron la posibilidad de acceder a créditos a tasa cero con un plazo de seis meses a través del Banco de La Pampa. Aseguran que los actuales niveles de facturación no permiten sostener los gastos operativos ni cumplir con compromisos asumidos.

Consultada sobre si tuvo que reducir personal, Errea afirmó: “No despedí a nadie y no lo voy a hacer mientras pueda evitarlo. Tengo un equipo de empleados leales, trabajadores, con responsabilidades familiares. Voy a sostenerlos mientras tenga espalda para hacerlo”.

“Nos partió al medio”

La referente comercial también hizo un repaso de la situación previa: “El primer semestre del año pasado fue muy malo. Luego repuntó levemente, y eso nos dio esperanza. Pero esta obra nos partió al medio. Encargamos mercadería con seis meses de anticipación, pensando en una mejora, y diez días antes nos enteramos del inicio de los trabajos. Eso nos descolocó por completo”.

La incertidumbre y la falta de planificación comunicacional fueron dos de los puntos más cuestionados. Los comerciantes coincidieron en que no están en condiciones de resistir otro mes con esta dinámica y apelaron a una pronta respuesta por parte del Ejecutivo.